La Inversión Extranjera Directa (IED) hacia Honduras sumó 296.4 millones de dólares, de enero a junio, superior en 48.5 millones (19.5%) en comparación al registrado en el mismo período de 2019, según el Banco Central de Honduras (BCH).
Analistas económicos presagian una caída hasta de un 30 por ciento para el cierre de este año. Sumando desplomes por cinco año consecutivos, desde 2015 cuando la economía hondureña percibió el mayor ingreso.
Favoreció la recuperación de las cuentas por cobrar de empresas de la Industria de Bienes de Transformación (Maquila) con sus filiales en el exterior, primordialmente en Estados Unidos; hecho que se había reportado como una de los motivos de reducción en la IED durante 2019 .
El flujo neto positivo de IED entre enero y junio de 2020 se originó en su mayor parte por el comportamiento del primer trimestre del año en curso, ya que en el segundo trimestre de dicho año se observó un flujo negativo.
La mayoría de las firmas subsidiarias y asociadas de inversionistas extranjeros reportaron menores ingresos; debido a menores entradas de capital y un incremento en sus costos operativos, producto del choque negativo en la demanda externa y la actividad económica a nivel interno, por las medidas de confinamiento obligatorias para la mitigación del brote de COVID-19.
Entre las actividades económicas con más captación de recursos financieros de IED en el primer semestre de 2020, se encuentran: la Maquila y los Servicios (básicamente Financieros), seguidos por Electricidad, Gas y Agua y la categoría de Transporte, Almacenaje y Telecomunicaciones.
Lo anterior fue contrarrestado parcialmente, por la reducción de los flujos de empresas en las actividades económicas de Industria Manufacturera y Comercio, Restaurantes y Hoteles. Por país de procedencia de la IED, sobresalen los capitales percibidos de Estados Unidos, Colombia, Panamá y Guatemala.
El flujo de Utilidades Reinvertidas de subsidiarias y asociadas de empresas multinacionales, contabilizó a junio un monto de 169.6 millones de dólares (57.2% del total), lo que representó una disminución de 184.6 millones (52.1%), respecto a lo alcanzado al segundo trimestre de 2019.
Este comportamiento es resultado del choque negativo propiciado por la pandemia del COVID-19 en la economía hondureña y en sus socios comerciales, afectando tanto a las empresas que su principal fuente de ingresos son las ventas de bienes y servicios en el mercado interno, como las que destinan su producción a exportaciones.