El poeta hondureño Carlos Roberto Reyes Paz obtuvo el tercer lugar en el concurso internacional de poesía #AniversariosPoetasHispanos en la categoría elección del jurado.
Asimsimo, el artista nacional ganó el primer lugar en el concurso literario José Revueltas Certamen carta a mi hijo en la Ciudad de México en 1991.
Entre sus obras publicadas están: En la revista luz de candil y poetas hispanos.
Reyes Paz nació el 12 de octubre de 1968 en los llanitos de Marcovia, departamento de Choluteca, una pequeña aldea al sur de Honduras.
Ingresado desde los 14 años al ejército en el primer batallón de ingenieros, destacado como militar contra el conflicto guerrillero en la frontera con Nicaragua.
Amante de la literatura, admirador de la mujer por lo que sabe, pero mucho más por lo que es, bendita fuente de inspiración y prolongación de la vida.
Entre sus poemas destacan:
“Mi credo” (tercer lugar en el concurso internacional de poesía, aniversario de poetas hispanos, por calidad literaria, elección del jurado. )
” Mi patria es ” (pedazos de mi alma)
“A mi madre en la distancia”
“Nostalgias”
“A mi patria y a sus hijos”
“Un sueño”
“Sinceridades”
“Mi esposa”
“A mi madre en la distancia”
Entre otros.
” Mi patria es “
( Pedazos de mi alma )
… Me preguntaban mis hijos
Del país dónde soy yo.
-Que si es lindo, que si es grande,
que si extraño aquella tierra
que un buen día me parió.-
Se agolpaban mis respuestas,
y de pronto me callé…
Mi país es cómo un cristo
cuando está crucificado,
sufre por aquellos hijos,que a otras tierras se han marchado.
Pero allá sigue la lucha,
porque hay algo muy sagrado
y que la mantiene en pie.
Porque vive la esperanza,
en el niño, en el ” “cipote”,
el que estudia, el que juega
y el que come tigüilote.
En la niña palillona
que algún día será pintora,
como Gabriela Fajardo,
que es la luz de mil auroras,
que es artista autodidacta
y desde luego gran señora.
! Si…Es Honduras,¡
esas manos campesinas
que trabajan por su raza,
por su patria, por su tierra
y el sustento de su casa.
Son sus valles, sus montañas,
y sus grandes cordilleras,
es la fe y la esperanza
de floridas primaveras.
…Es poema y es cosecha
de sus campos labrantíos,
y el llanto de sus cielos
bendición para sus ríos.
Es el vuelo de un sanate
y el canto de un pijullo,
…Yo las letras de mi alma
que le escriben con orgullo.
Es mi patria,cinco estrellas
que iluminan mi destino,
cinco estrellas que iluminan
con su lampo mi camino.
Es Catracho aquel que llora
cuando ondea la bandera,
el que llora porque un día
se alejó de su frontera.
Las historias de un guerrero
de aquel viejo Congolòn,
es Lempira que nos grita
que luchemos por Honduras
en un sólo corazón.
Es Honduras el perfume
que me sigue a dónde vaya
es el lienzo que ha pintado
el pintor Tomás Amaya.
Es aquel que no conozco,
y que lucha por un sueño,
el que grita con el alma,
” Aquí estoy…Soy Hondureño.”
” MI CREDO “
Creo en usted que lee lo que hoy escribo,
y en el poeta que cree en su patria
como en el vértice de un juramento
Creo en el hombre que pidió perdón a la mujer y la convirtió en un
monumento,
y en el que escribe con nostalgia
sus memorias en el viento
Creo en la soledad y en el que le hace compañía,
y en la aurora al bendecirnos con la luz de un nuevo día.
Creo en el mar que nace en mi alma para morir en
mis ojos convertido en lágrimas.
Creo en la cuma, el machete y la matata
que dejé en mi tierra por un sueño
y ahora en nostalgias me mata
Creo en el sol que nace y muere en el ocaso,
y en el amigo que te abriga, al fundirse en un abrazo.
Creo en el consejo sabio que un día me dio mi abuelo,
también creo que mi abuela me ha cuidado desde el cielo.
Creo en el vagabundo que compró su soledad,
con diez dedos en sus bolsas y todavía le alcanza,
para comprarse una hoguera y no perder la esperanza
de encontrarse en el camino, una mano con bondad.
Creo en Froylan Turcios ” El catracho,” el poeta.
Que elevó sus oraciones hasta el cielo cual saetas
Dios bendijo así a mi pueblo y a sus campos labrantíos,
a mi familia, a mis amigos, que son pocos… Pero míos.
Creo en la creación divina Por ser única y exacta,
Y en las manos prodigiosas del artista autodidacta.
Que aprendió desde su madre que la inspiración se lacta.
Creo en la madre que da luz desde su vientre,
que sonríe ante el dolor del milagro de la vida.
Por ser toda una guerrera, pido a Dios que te bendiga,
y el manantial de tu virtud que perdure para siempre.
Creo en mi esposa que orgullosa va a mi lado,
la que unas veces es mi vida, es mi tierra y mi arado,
Otras veces es mi cruz y la lanza en mi costado,
Pero hace con sus flores en mi vida primaveras,
Y el perfume de su piel me ha seguido donde quiera.
Creo en mis manos que escribieron este “credo”
…Y si agradecerles con esto puedo,
Con un fuerte abrazo, hago chicas las distancias,
Y desde mi corazón que es compendio de mi alma,
con mi mirada hacia el cielo, de verdad con humildad…
” MUCHAS GRACIAS.”