TEGUCIGALPA. De “político”, calificó el presidente de las Juntas de Agua en el Parque Nacional La Tigra, Manuel Amador, el informe elaborado por la Comisión Especial del Congreso Nacional (CN), documento que valora el cumplimiento administrativo de los desarrolladores para la obtención de licencias en el inicio del polémico proyecto habitacional “Bosques de Santa María”.
Amador, manifestó que “veíamos venir esto, es algo no técnico sino que político y a pesar que no es vinculante da tristeza ver como los padres de la Patria dicen que eso no va a afectar la zona de amortiguamiento, cuando ese terreno más bien está en la zona núcleo”.
“No hay duda que es informe político, el ICF (Instituto de Conservación Forestal) que si son técnicos recomendaban que ese es un terreno irregular y había que hacer estudios biólogos e hidrólogos. Las Juntas de Agua no fuimos tomadas en cuenta”, agregó.
El dirigente prevé que las decisiones venideras sobre el proyecto serán positivas y aunque la opinión de los parlamentarios no es vinculante con la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), y las instancias del Poder Ejecutivo, estas seguirán la tendencia de darles “luz verde” a los urbanistas.
Además anunció que reactivarán las manifestaciones, plantones y protestas en las cercanías a La Tigra para defenderla de modelos de desarrollo que no sean sostenibles.
Un tercio del agua demandada por los hogares capitalinos nace en esta montaña, destacan varios conservacionistas.
“No nos quedará que regresar a las calles para defender a ese pulmón, el único que tenemos en la capital, lo tenemos que defender. Construir ese proyecto afectará a todos”, concluyó.