Centenares de hondureños aglutinados en los movimientos “Indignados” y “Las antorchas” exigieron la “inmediata separación” de Juan Orlando Hernández de la Presidencia de Honduras.
También exigen se investigue y enjuicie a Hernández por presunta corrupción, lo mismo que a “su círculo familiar y sus allegados políticos y empresariales”.
En una marcha en Tegucigalpa, los manifestantes corearon consignas contra el gobernante y señalaron que el Ministerio Público y la MACCIH (Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras) “han recibido múltiples denuncias y evidencias indicativas” de que Hernández “ha cometido delitos en contra de la Constitución de la República y en contra del Estado hondureño”.
Además, Hernández “tiene vínculos directos con personas señaladas por actos de corrupción incluyendo narcotráfico, como consta en las cortes de los Estados Unidos. Un ejemplo, es que su propio hermano Antonio (Tony) Hernández, está siendo juzgado en Nueva York por tráfico de drogas a gran escala”, subraya un comunicado de los manifestantes.
También exigieron la permanencia en el país de la MACCIH, que depende de la Organización de Estados Americanos (OEA), “con la ampliación de sus atribuciones para que desarrolle investigación acertada y expedita para la judicialización de todos los actos de corrupción pública, que debe alcanzar a los grandes intelectuales del saqueo de este país, incluyendo a la familia Hernández”.
Al fiscal general, Óscar Chinchilla, los “Indignados” y de “Las antorchas” le pidieron que actúe de inmediato ante los actos de corrupción que involucran a los funcionarios del Estado de la presente y pasadas Administraciones.
“No toleraremos más impunidad y no más aplicación selectiva de la ley. Exigimos que la educación y la salud se mantengan públicas y accesibles a todos, pues son parte de los derechos fundamentales universales de los pueblos”, añade el comunicado.
Además, rechazaron los intentos de grupos económicos de privatizar la salud y la educación, dejando desamparados a los más pobres.
“Dejar sin salud ni educación a un pueblo es un acto inhumano y criminal por los cuales deben ser juzgados todos los responsables”, indicaron los manifestantes.
Entre otras cosas, se solidarizaron con los hondureños que emigran del país por la violencia y la pobreza, y exigieron el respeto a los derechos de los inmigrantes.
También hicieron un llamamiento a un “compromiso nacional a los “diferentes sectores ciudadanos y sociales a unir sus fuerzas por el rescate de Honduras y de su institucionalidad”.
“Llamamos a todos los ciudadanos en todo el país a que se unan en la protesta pacífica ciudadana y a toda acción por el bien de Honduras. Este sistema corrupto y todo intento dictatorial van a caer si todos los ciudadanos nos mantenemos unidos. Debemos ser contundentes en nuestras acciones, siguiendo la verdad y la justicia”, añade su protesta.