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El presidente Juan Orlando Hernández anunció este lunes que la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP) queda “sepultada” con la entrada en vigencia de la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales (DIDADPOL).
El mandatario dijo que “necesitamos implementar un nuevo marco de la Policía Nacional”.
Agregó que se ha puesto en marcha un nuevo sistema de evaluación y certificación.
“Necesitamos que el Congreso Nacional nos saque estas dos nuevas piezas de legislación: Ley de Policía y de la Carrera Policial”, sostuvo.
La Diecp fue creada por el Congreso Nacional el 11 de noviembre de 2011, tras la denominada “crisis de octubre” que reveló la operación de bandas criminales y la infiltración del crimen organizado en la estructura policial.
El abogado Óscar Vásquez Tercero, director de la Diecp, manifestó que después de escuchar con atención al presidente Hernández concluyó que este anuncio “no es algo nuevo y viene de hace muchos años atrás”.
“Han habido criterios mal intencionados sin conocer de cerca nuestra labor, porque la Diecp es una institución que yo me honro en reconocer que ha cumplido con la labor que la ley le permite cumplir”, argumentó.
Expresó que los números que se mencionan de más de 5 mil nuevos policías es un esfuerzo de la Diecp y que “no le compete a nadie más”.
“Cuando nosotros asumimos en el mes de junio de 2015, dos semanas después en una reunión con el secretario de Seguridad, nos enteramos que querían desaparecer a la institución”, reveló.
Para Hernández es necesario que la Policía sea robusta y confiable.
Nivel de confianza
En otra parte de su intervención el presidente hondureño destacó el trabajo de la Policía Nacional desde que inició el proceso de depuración.
“Tengo muestras claras y estadísticas, quiero decir que la Policía de hoy tiene un reconocimiento de todo el pueblo hondureño, no se sientan mal, el nivel de confianza que se tiene en la policía ahora no se tenía hace cinco años”, dijo.
Agregó que “miramos los efectos de lo que no se hizo cuatro, cinco o seis años, antes de esa fecha, habían alertas, allá en 2008 y 2009 embajadores del cuerpo diplomáticos se reunían y alzaban su voz. Decían que Honduras se había convertido prácticamente en un narco Estado, Honduras prácticamente era un Estado fallido y eso no solo tenía que ver con la Policía Nacional, también tenía que ver con todos los sectores de sociedad”.
