Aunque parezca una noticia falsa, el “Pozo del infierno” es un supuesto pozo excavado en Rusia de tal profundidad que habría llegado hasta el infierno.
La noticia urbana ha estado circulando por internet desde al menos 1997, no deja de sorprender por lo escalofriante del relato.
Esta noticia fue emitida por primera vez en inglés en 1989 por el canal de radio Trinity Broadcasting Network, que había recogido la historia de varios periódicos finlandeses.
Dicha información del “Pozo del infierno” pronto se extendió a los periódicos de los Estados Unidos y pronto comenzaron a aparecer grabaciones de los supuestos “gritos de los condenados” en varios lugares de internet.
Esta historia llegó hasta el canal religioso de radio TBN, que afirmaba que era una “prueba” de la existencia literal del infierno como enseña la Biblia.
En 1970 comenzó perforación
El 24 de mayo de 1970 comenzó la perforación del que más tarde se conocería como el “Pozo del Infierno”. Este proyecto que se llevó a cabo en la península de Kola, cerca de la frontera con Noruega, en Rusia, tenía como objetivo realizar una perforación de 15 kilómetros de profundidad. Para tomar muestras y realizar mediciones que permitieran entender un poco más la naturaleza de la corteza terrestre; así lo mencionan en cabovolo.com.
Cuando ya se llevaba casi 13 años de trabajos, en 1983, la perforación alcanzó los 12 kilómetros, pero los trabajos se detuvieron. Para el 27 de setiembre de 1984, durante la maniobra de retirada de la corona del taladro, este se atascó. Lo cual provocó una rotura a los 7 kilómetros de profundidad: se habían perdido cinco años de trabajo, cinco mil metros de tuberías habían quedado atrapados en el fondo del pozo.
La profundidad máxima a la que se llegó fue de 12 kilómetros 262 metros, en 1989. Esto debido a las altas temperaturas que se registraron, mismas que no permitir continuar con los trabajaos. Los aportes que brindó esta excavación fueron muchos. Según los expertos, conforme iban avanzando, aparte del agua, encontraron acumulaciones de gas y algunas sales de iodo y bromo. Incluso, cuando alcanzaron los seis kilómetros, se encontraron fósiles microscópicos, entre los que se identificaron 24 especies distintas de plancton.