El líder de la comunidad garífuna Silvino Zapata fue ultimado a balazos en Masca, departamento de Omoa, zona norte de Honduras.
Versión de testigos revela que Zapata se encontraba cerrando uno de sus restaurantes, cuando fue sorprendido por desconocidos.
Los criminales llegaron al lugar y sin mediar palabra le dispararon a quemarropa, dejando mal herido al dirigente popular.
“A Silvino Zapata lo mataron unos desconocidos que llegaron a su negocio, en la jurisdicción de Omoa (norte) y le descargaron armas de fuego”, dijo la coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh), Bertha Oliva.
También indicó que se desconocen con certeza las causas del ataque, perpetrado hacia 00:30 locales, pero se da por hecho que se trata de “uno más de los asesinatos selectivos contra defensores de derechos humanos y del ambiente”.
Parientes trasladaron a Zapata a un centro asistencial en su intento de salvarle la vida, pero murió por las graves heridas.
El líder garífuna era dueño de dos restaurantes en la región, presidente del Consejo de Ancianos de la comunidad y defensor del medio ambiente.
DATO
Zapata formaba parte del Consejo de Ancianos de los garífunas, un organismo de toma decisiones sobre las políticas de los afrodescendientes del litoral del Caribe y formaba parte de un movimiento que rechaza proyectos hidroeléctricos en la zona, según Oliva.