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El presidente Juan Orlando Hernández pidió a los diputados del Congreso Nacional que conversen con los sectores que están en pugna en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y no solo con un sector, sino que con todos, pues considera que “esto no puede seguir así”.
El mandatario aclaró que el Poder Ejecutivo no puede intervenir en el problema interno de la Universidad, pero recordó que el Congreso Nacional sí ha tenido antecedentes de intervenir la Universidad cuando había un caos.
Resaltó que “hay padres que me pidieron que resolviera el problema, pero la Constitución de la República le da autonomía a la Universidad y si nosotros entramos allí, en uno u otro escenario, es algo que va a quedar como un antecedente”.
Sin embargo, el titular del Ejecutivo añadió que, “en la medida que pidan nuestra participación para mediar en esto, estamos listos, porque es triste el tiempo que ha pasado y el perjuicio que sufre la gente”.
El presidente Hernández añadió que cree que es el momento de que tanto los estudiantes que tienen tomada la Universidad como los padres de familia, los estudiantes que quieren clases y los maestros, entiendan que el daño se lo están haciendo a ellos mismos.
“¿Qué cosa no puede ser insuperable que no se resuelva en un diálogo”, se preguntó el mandatario para seguidamente expresar, “pero, sobre todo, ¿cómo no puede haber un diálogo teniendo como antecedente volver a permitir las clases?”.
“No permitir las clases es una negación a un derecho fundamental”, indicó, y añadió que “sentarse y permitir las clases no significa que no se pueden arreglar las otras cosas”.
Derechos de los estudiantes
El presidente Hernández considera que “los estudiantes tienen razón si la ley les da el derecho de participar en elecciones para ser parte de las autoridades, pero, eso sí, la ley también no da derecho a que tengan paridad”.
“Tienen derecho a ser parte de los organismos de dirección de la Universidad, no se les puede negar ese derecho”, insistió.
También –agregó- un elemento que nadie está obviando es que a finales de septiembre vence el período de muchas autoridades universitarias y otras ya vencieron.
“No puede seguir la Universidad acéfala; sería un contrasentido a quienes quieren organizar las estructuras de autoridad en la Universidad”, acotó.
Indicó que lo que sí es real para todos, e inclusive para los que tienen la Universidad tomada, es que están perdiendo clases.
“El tiempo perdido hasta los santos lo lloran”, apuntó el gobernante.
Mencionó que hay alumnos becados que no hallan qué hacer porque dicen que de la Universidad les están quitando una beca que era complementaria “de la otra que dábamos nosotros”.
“Y luego me dicen los administradores del programa (Becas Honduras 20/20) : ‘¿y si el Tribunal de Cuentas nos repara por darle la beca a alguien que no ha estado yendo a clases?’ Ese es un tremendo problema”, enfatizó.
“Son casi 8,000 muchachos que tenemos becados, no es justo”, dijo.
Expresó que “aquí debemos de dejar atrás que los problemas se resuelven en pleitos; aquí todo mundo tiene que respetar el derecho del otro y ese llega hasta donde llega el suyo”.
“Nos ha costado llegar a este punto, no retrocedamos”, finalizó.
